Germán Bonaccorsi y Matías Orfano Goncalves charlaron con El1 Digital sobre la experiencia de jugar en Estados Unidos. Además, el bateador y lanzador de Fénix, equipo de la Universidad que se consagró en el torneo de ASBA, hablaron de los objetivos planteados para el segundo semestre.

“Vayan a jugar al fútbol y dejen de hacer ese deporte yanqui”, suelen gritarles desde los coches allá, en el fondo, donde termina el predio de la Universidad Nacional de La Matanza, en la calle La Paz y las vías. Fénix, el equipo de la Primera de softbol, se entrena en el campo plagado de mosquitos y sufriendo la falta de respeto de los conductores. Pero nada les importa. Ellos siguen por su camino, ese que, este año, los llevó a consagrarse por primera vez en el Torneo Apertura de la Asociación de Sotfbol de Buenos Aires (ASBA).

“Fue un objetivo no esperado para este momento. Hace tres años que estamos en ASBA y siempre éramos protagonistas pero nos faltaba algo. Este año, quizás sin proponérnoslo, se dio. Cuando empieza un campeonato, nos planteamos igualar o mejorar lo del campeonato anterior. Queríamos jugar una final porque nunca lo habíamos hecho y ganamos”, cuenta Germán Bonaccorsi, bateador del conjunto y coordinador de la especialidad en la UNLaM.

Y continuó: “En los años anteriores habíamos clasificado mejor y teníamos que jugar un partido; si ganábamos, jugábamos la final. Este año no tuvimos una buena primera parte y tuvimos que jugar tres partidos. Ganamos uno, ganamos otro y en la final no teníamos nada que perder contra Pilar, que es siempre el favorito. Se ve que nosotros entramos relajados, ellos sintieron la presión y fuimos campeones”.

Este título, más otras participaciones en la previa (torneos en Morón, Las Heras, Paraná, que es la meca de la disciplina, y Cancún, autofinanciado por los integrantes del equipo), llevó a que organizadores de torneos en Estados Unidos inviten a 35 argentinos, entre ellos Bonaccorsi y Matías Orfano Goncalves, lanzador de Fénix. “Para mí fue una vuelta, porque hace diez años había estado jugando en algunos equipos y estuve de gira con la Selección, y la verdad es que estuvo buenísimo porque me reencontré con gente que conocía. Jugamos cuatro torneos de fines de semana con el equipo Rice Lake Orangemen. En dos nos fue muy bien, donde salimos segundos y terceros. El nivel era buenísimo”, comenta Germán, elegido como uno de los integrantes del equipo ideal en el NAFA World Series, en Dakota del Norte.

“Yo fui a jugar un Mundial… La mayoría de los equipos son muy buenos porque están los mejores. En los equipos tops, son muy buenos bateadores y tienen excelentes lanzadores, por lo que es muy difícil anotar o acercarte al resultado. Y en los equipos que son de menor nivel, los bateadores siguen manteniendo el nivel pero a los pitchers les podés anotar”, expresa Orfano, quien recogió experiencia. “Vinimos con un montón de conceptos nuevos para implementar. Esto es fracasar y seguir, fracasar y seguir hasta que lográs el objetivo. Pero trajimos un montón de tips para entrenar y aplicar en Fénix”, completa.

De vuelta al pago, el conjunto de la Universidad se preparaba para comenzar el domingo pasado -si el tiempo lo permitía- el Torneo Clausura y enfocarse en lo que viene. “Es un deporte amateur, el que hay que meterle mucha garra, y los chicos que vienen acá son jugadores de softbol. No somos un supequipo pero trabajamos mucho. Y en ese trabajo, a la hora de realizar nuestra tarea, cada uno da lo mejor de sí. Eso se traduce en los resultados que estamos teniendo”, explica Bonaccorsi.

Y Orfano Goncalves fija las metas para el segundo semestre: “El objetivo principal es el Nacional de clubes. Si bien trataremos de lograr el campeonato nuevamente, el foco está en conseguir el ascenso en Paraná, que te da la categoría a nivel país. Ahora estamos en la B, que son seis equipos, y este año apuntamos a entrar al playoff, lo que te permite escalar a la categoría A, donde están los ocho mejores. Es muy difícil llegar y más difícil mantenerse, pero vamos a ir por eso”.

Que se vengan las chicas…
Otro de los proyectos que posee el softbol de la UNLaM es contar con un equipo femenino. “Siempre tenemos la ilusión de armar la rama femenina. Si bien hay interesadas, no son las suficientes para empezar, así que esperamos que en los JUR, donde el softbol va a ser promocional en ambas ramas, se sumen chicas”, desea Bonaccorsi. “Sería genial porque le daría más difusión al deporte. Ojalá que algún día podamos tener un equipo para ampliar el alcance del deporte en la Universidad”, agrega Orfano Goncalves.